Una de las metáforas más comunes con la que nos referimos al Big Data es la de ‘nuevo petróleo’ o ‘petróleo del siglo XXI’. Y, si bien puede ser cierto en cuanto al valor que entrañan estos dos activos, hay una gran diferencia entre ambos: la finitud. Porque si el petróleo es un recurso que -al menos en teoría- tiene los días contados, con los datos sucede justo lo contrario. Cada año que pasa el volumen de producción aumenta desaforadamente y la tendencia a la alza.
Los españoles pasamos una media de 5 horas al día conectados a Internet, desde cualquier tipo de dispositivo. A nivel global, la media asciende a más de 6 horas al día, según los datos de Hootsuite y We Are Social. Y de la mano de nuestro uso intensivo de Internet va la generación intensiva de datos. Cada like, cada stream, cada descarga, cada compartido, cada búsqueda… Todas y cada una de nuestras acciones online dejan un rastro.
CRECIMIENTO DISPARADO
Generamos información con la que las empresas pueden formarse una idea bien definida del individuo que se sitúa al otro lado de la pantalla. Y lo hacemos de una manera veloz y continuada.
La empresa de análisis de datos e inteligencia de negocio Domo lleva siete años consecutivos elaborando una revisión exhaustiva al comportamiento de los internautas y reflejando la cantidad de datos generados por minuto en plataformas y aplicaciones como Instagram, Twitter, Google o Netflix. Y nos muestra, por ejemplo, que entre el primer informe, de 2013, y el más reciente, de 2019, se han más que duplicado las búsquedas en Google.
La penetración de Internet se situaba en enero de 2019 en el 56,1% de la población mundial, porcentaje equivalente a 4.390 millones de personas. Esta cifra supone un aumento del 9% con respecto a enero de 2018. Y asegura Domo en su informe ‘Los datos nunca duermen’ que en este 2020 que acaba de comenzar habrá 40 veces más bytes que estrellas existen en el universo conocido.
Durante 2019, en un solo minuto AirBnb registra una media de 1.389 reservas de usuarios con el alojamiento que buscan, en todo el mundo. Bastan 60 segundos para que 390.030 apps sean descargadas, para que 188.000.000 mails sean enviados o para que los conductores de Uber atiendan 9.772 viajes.
LA APUESTA POR EL STREAMING
Y se ve una tendencia clara si se compara la generación de datos de 2018 con la de 2019. En solo un año, el vídeo en streaming ha dado un salto de gigante y todo apunta a que seguirá creciendo.
Netflix registró un incremento interanual del 614% en las horas de streaming visualizadas, desde las 97.222 horas de 2018 a las 694.444 horas de 2019, mientras que las visualizaciones en YouTube aumentaron desde las 4.333.560 por minuto de 2018 a los más de 4.500.000 de 2019.
Fuente:
María Refojos, M. R. (2020, 6 enero). El gran mapa del Big Data: ¿de dónde vienen todos nuestros datos? Recuperado 6 enero, 2020, de https://byzness.elperiodico.com/es/innovadores/20200106/el-gran-mapa-del-big-data-de-donde-vienen-todos-nuestros-datos-7793859