El cambio climático se está traduciendo en eventos cada vez más extremos, los ciclos estacionales ya han variado, las olas de calor son cada vez más intensas, a la par de la ausencia de lluvias, y mayores las sequías, alternándose las tormentas y huracanes con mayor intensidad; estos cambios climáticos están afectando los ciclos agrícolas de cultivos, como el cacao, el aceite de oliva, el arroz, la soya y la papa, con una alta demanda en los mercados globales; en el caso de México, la cebolla y el jitomate, entre otros, registran las fluctuaciones más notorias.
La investigadora Samantha Burgess (Burguess, 2024), del C3S (Servicio de Cambio Climático de Copernicus), declaró que este mes de enero ha sido el más caluroso, puesto que la temperatura media global llegó a más de 1,52Cº, superior al promedio del periodo preindustrial de 1850-1900.
El impacto se ha observado en Europa, EEUU y Asia, donde se han registrado malas cosechas y pérdidas de cultivos; en México la sequía y la falta de lluvias provocó que el 2023 fuera el año más seco de los últimos 82 años, con el 21.1% de menos lluvia, la sequía extrema se registra en las entidades del norte y del centro de la República, incluyendo al Estado de Hidalgo (Sequía Monitor, 2024), las 210 presas más grandes, registran un déficit del 26%, el sistema cutzamala solo tiene el 41% de su capacidad.
Los contrastes de Calores, escasez de lluvias, huracanes y frentes fríos, ha provocado un cambio en las capacidades de adaptación de la biodiversidad, cuya pérdida y colapso de ecosistemas, es considerado como uno de los principales riesgos globales por el Foro Económico Mundial de Davos (Saadia, 2024).
La sociedad global enfrenta un contexto de crisis múltiples: inflación provocada por los conflictos geobélicos, Ucrania-Rusia y el genocidio de Palestinos, por parte de Israel, como los resultados adversos, por el mal uso de la Inteligencia Artificial, la desinformación generalizada, el escalamiento de la violencia-criminal, el terrorismo y los ciberataques, cada véz mas sofisticados, la migración masiva, la recesión en países como Alemania, Gran Gretaña, Francia, Canadá y Japón, desempleo, la disrupción sistemática de las cadenas de suministro, conflictos por recursos naturales y alimentos en los mercados, como la concentración del poder tecnológico.
Vivimos dos modelos económicos, uno pone a la rentabilidad por encima del bienestar social y de la sustentabilidad, basado en la privatización total; el otro modelo da preferencia al bienestar social, poniendo a los derechos humanos y a la sustentabilidad por encima de la rentabilidad, a este se le conoce como economía social.
Después de dos siglos de progreso, la pobreza sigue siendo una realidad, hay tantas definiciones de pobreza, como naciones existentes, pero si se adopta el criterio de Our World in Data (Max, 2024) de 30 dólares al día, que se aplica en las naciones de altos ingresos, el 84% de la población mundial está en pobreza.
La pobreza se incrementa en proporción directa al incremento de la riqueza, generando una desigualdad inhumana, si los sectores de más altos ingresos, y los bancos, ganan en proporciones superiores al crecimiento del ingreso nacional, esas ganancias proceden del ingreso de los sectores de más bajos ingresos; treinta años el salario de los mexicanos, aumentaba menos que la inflación, mientras las ganancias por rentabilidad eran superiores a la inflación. Esto explica la concentración de la riqueza
Para evitar que el cambio climático impacte cada vez más a la producción de alimentos agrícolas, es necesario impulsar el desarrollo tecnológico, en la gran diversidad de cultivos, como la aplicación del CRISPR para la mutación de especies agrícolas, haciéndolas resilientes a los cambios climáticos.
Crear más organizaciones como Copenicus de la Comunidad Europea, para monitorear, los cambios climáticos, que orienten al desarrollo tecnológico del campo, hacia la resiliencia climática, impulsar la aplicación de la economía circular, en los sectores agrícolas de las naciones más rezagadas; sí a la agricultura regenerativa, no al glifosato, ni a la agricultura sin agricultores, sí al sentido social del desarrollo tecnológico en el campo, facilitando la transición climática hacia la soberanía alimentaria de las naciones más pobres .
Crisis Alimentaria por el Cambio Climático y el Modelo de Mercado
Bibliografía
Burguess, S. (9 de febrero de 2024). Copernicus. Recuperado el febrero de 2024, de Servicio de Cambio Climático: https://climate.copernicus.eu/warmest-january-record-12-month-average-over-15degc-above-preindustrial
- T., & A. W. (2007). Wikinomics: La nueva economía de las multitudes inteligentes. Barcelona España: Paidós Ibérica.
Max, R. (15 de enero de 2024). Our World in Data. Recuperado el enero de 2024, de ourworldindata.org: https://ourworldindata.org/extreme-poverty-in-brief?utm_source=OWID+Newsletter&utm_campaign=c2d226a77b-biweekly-digest-2024-02-16&utm_medium=email&utm_term=0_2e166c1fc1-3875482ed3-%5BLIST_EMAIL_ID%5D
Saadia, Z. (2024). Global Risk Report 2024. Geneva Switzerland: World Economic Forum.
Sequia Monitor. (15 de enero de 2024). Gobierno de México. Recuperado el enero de 2024, de Monitor de Sequía: https://smn.conagua.gob.mx/es/climatologia/monitor-de-sequia/monitor-de-sequia-en-mexico