Por un lado José Narro declara “que la forma en que se conduce el país no es la pertinente. México no va bien, el camino que se está siguiendo no es el conveniente y las cosas pueden ir peor, de no cambiarse la ruta por la que transita”
Por otra parte López Obrador expresa “en México no tenemos problemas financieros y tampoco tenemos problemas de inflación, rinde más el dinero, el peso se ha fortalecido a pesar del conflicto comercial entre EU y China, no le preocupa el bajo crecimiento del PIB porque hay desarrollo”.
Ante esta disyuntiva surge la pregunta ¿puede haber desarrollo sin crecimiento? Por crecimiento económico se entiende el incremento del Producto Interno Bruto, que se integra con la producción de bienes y servicios en una economía donde las empresas pueden ser de capital nacional o internacional, en un tiempo determinado, tanto a precios corrientes o con base a un año específico.
La pregunta ¿quién produce más y con más productividad y por ende son más competitivas? ¿Las empresas mexicanas o las empresas trasnacionales?, la respuesta es obvia, porque también explica el quien domina la economía mexicana, claro que son las empresas trasnacionales.
Según el Instituto para Desarrollo Industrial y Crecimiento Económico, las empresas trasnacionales obtienen hasta el 73% de sus ganancias en México, según datos del Consejo Ejecutivo de Empresas Globales que agrupa a 42 empresas trasnacionales, en sectores como el aeronáutico, alimentos, bebidas automotriz, y claro bancario, estas grandes empresas representan más del 10% del PIB nacional y el 11% de las exportaciones hacia los EU. Esto evidencia que el motor de la economía nacional y de las exportaciones son las empresas trasnacionales.
¿Por qué han bajado su producción? ¿Por el efecto Trump? Seguramente, el Presidente Norteamericano en aras de su ambición y megalomanía hegemónica, está llevando al mundo a una recesión de peligrosas consecuencias bélicas, su guerra comercial contra China incluye la compra de Groelandia con una extensión territorial de 2.16 millones de km cuadrados habitada tan solo por 56 mil personas, pero con abundancia en oro, carbón, zinc, cobre, hierro, uranio, diamantes, gas, petróleo, agua más pura, y recursos pesqueros, pero sobre todo es una estrategia geopolítica contra Rusia y China. EU la compra o la invade.
El efecto Trump es un factor que lesiona a la Economía Mexicana, la cual está sometida en un proceso de transición a un modelo todavía por definirse, lo que se ha dejado ver es el sentido social, el cual estuvo ausente en el modelo económico que aplicaron los gobiernos de Miguel de la Madrid hasta Peña Nieto.
Desarrollo económico es un concepto que se ha venido reconfigurando a lo largo de los años, en el que los aspectos como la sustentabilidad, el cambio climático y sobretodo el vertiginoso cambio científico-tecnológico. Reducir el desarrollo a una mejora de bienestar social como consecuencia de incrementar los salarios por decisión presidencial, e incluir a los jóvenes en actividades de aprendices que no de empleos formales, es una visión romántica del fenómeno tan complejo de la economía y del bienestar social.
El concepto tradicional del Desarrollo se basa en el incremento del ingreso per cápita en un largo periodo de tiempo, además de la expansión continua del potencial económico; Amartya Sen no define el desarrollo en función del ingreso, sino de la capacidad que tienen las personas de transformar ese ingreso en aquello que ellas consideran necesario para elevar su nivel de vida a niveles incrementales y de sustentabilidad, esto es el llamado “Desarrollo en Libertad” cuya base es el conocimiento y su transformación en capacidades científicas y tecnológicas, capacidades de resiliencia para enfrentar los cambios tecnológicos en los procesos económicos.
El planteamiento de José Narro y del grupo futuro 21, no muestra qué modelo a construir para superar los rezagos sociales y la insultante desigualdad; por su parte los programas sociales de la 4T no encuentran la convergencia hacia la reconfiguración de una economía competitiva y sustentable, con fortalezas suficientes para enfrentar los conflictos internacionales, donde el conocimiento, la investigación, el desarrollo científico-tecnológico y la innovación son eje transversal ineludible. ¿y usted qué piensa?