Por: Roberto Morales Estrella
¿Hasta cuándo se erradicará la violencia contra las mujeres los niños y niñas? ¿hasta cuándo se erradicará la desigualdad y la discriminación contra la mujer? ¿Acaso lo peor está por venir?
Las cifras de feminicidios y abusos son motivo de vergüenza de toda sociedad, todo tipo de agresión hacia las mujeres, niños y niñas, son testimonio de una falta de evolución cerebral de los misóginos agresores, atentar contra la mujer y los más débiles, es atentar contra la especie humana, ¿acaso sobreviviría la espacie humana sin mujeres?
No obstante, gracias al conocimiento, la mujer se ha abierto paso a lo largo de la historia, por ejemplo, en el año 2354 a. C. una Mujer llamada Hedu Anna era la que solucionaba los problemas de ingeniería, para que Imhotep continuara construyendo las pirámides de los Faraones.
Las Mujeres han dado muestra de gran talento científico, como la matemática, astrónoma y filósofa Hipatía de Alejandría (370-415 d.C.), María Gaetana Agnesi, matemática que desarrolló el cálculo diferencial e integral, a los nueve años hablaba francés, latín, griego, y hebreo.
No menos importante fue el trabajo de Rosalind Franklin que tomó los primeros rayos X de ADN cristalizado, haciendo posible la demostración de la estructura helicoidal del ADN, permitiéndole a James Watson y Francis Crick obtener el premio nobel en 1962, ni ellos, ni nadie mencionó el trabajo de Rosalind, en franca ingratitud científica e injusticia de género.
No se requiere ser científico, dicen José Florito y Florencia Caro para darse cuenta de que la ciencia y la tecnología tiene cara de varón, lo que significa la falta de equidad de género, evidenciando la masculinización de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y la matemática.
Si bien ya hay más participación de la mujer en la educación superior, todavía se le discrimina para que acceda a disciplinas científicas; por ejemplo, de 945 premios Nobel que se han entregado solo el 5.7% corresponde a mujeres, o sea 54.
En el caso de México, desde que se fundó el Sistema Nacional de Investigadores, (SNI) gracias al impulso de Jesús Reyes Heroles cuando fue Secretario de Educación Pública, hasta el 2019, están reconocidos y son integrantes 30 mil 548 investigadores, de los cuales solo una tercera parte son mujeres.
El SNI estableció la figura del Investigador de tiempo completo, pero ¿acaso hay una política articulada universidades-empresas-sociedad que impulse la investigación tanto de Frontera como Aplicada, que derive en mayor productividad y competitividad del 98% de la estructura productiva nacional que son las mipymes? Claro que no.
Pero eso si las condiciones institucionales son favorables a los extranjeros que detentan el 95% de las solicitudes, como de las patentes concedidas. Urgen políticas, basadas en datos, que constituyan rutas apuntando a igualar el terreno en género. Hombre y mujer en redes institucionales de investigación, para lograr el desarrollo tecnológico, que inserte a México al paradigma global, superando los rezagos y la dependencia tecnológica de las trasnacionales.
La sociedad mexicana demanda la inclusión de la mujer en la ciencia, lo que implica erradicar convencionalismos y prejuicios sociales, alimentados por el chauvinismo, machismo y la misoginia contra la participación de la mujer, en el binomio ciencia-tecnología, dice Elizabeth Téllez investigadora en el área de Bioética.
María de Jesús Medina Doctora en Biótica y jurisprudencia médica, por la Universidad de Manchester, cuando regresó a México se enfrentó al bulling por parte de sus compañeros hombres, con expresiones como ¿edición genética? ¿eso existe?
Xóchitl Guadalupe Cruz López, niña chiapaneca de 8 años, fue merecedora del reconocimiento “ICE a la Mujer en 2018” por haber diseñado un calentador de agua, construido a partir de materiales reciclables, funcionando con energía solar. Su virtud es entender al mundo que la rodea, desarrollando habilidades para resolver problemas.
Desarrollando conocimientos científico-tecnológicos, también se ganan batallas a favor de la mujer. Pero es imprescindible que todo aquel que violente a la mujer, se le juzgue, pero transformarlos en seres racionales, requiere de una participación concertada entre autoridades y todos los sectores sociales, proceso social cuesta arriba pero no imposible y sí exigible. Por lo menos que el feminicidio sea considerado delito grave.
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