Las condiciones políticas, económicas, climáticas, financieras, militares, tecnológicas y claro las sociales, que toda la humanidad está enfrentando, son planteadas por expertos congregados en el Foro Económico Mundial de Davos, que convergen en el Informe de Riesgos globales de este 2023, concluyendo que estamos viviendo una Policrisis (G. Markovitz 2023).
La directora general del Foro Económico Mundial (WEF por sus siglas en inglés), Saadia Zahidi mencionó que el clima y el desarrollo humano deben estar en el centro de las preocupaciones de los líderes mundiales. La cooperación es el único camino a seguir (Markovitz 2023). La reunión anual del WEF será del 16 al 20 de enero, con el tema central de “Cooperación en un Mundo Fragmentado”.
Los líderes mundiales están centrados más en intereses mercantiles y de geopolítica regional, por lo que el reto fundamental es la cooperación si realmente se quiere enfrentar los complejos desafíos y detener la ruta hacia la extinción de nuestra especie. Trabajar juntos es fundamental. (Christian Mumenthaler 2023).
La tecnología se ha venido desarrollando a una velocidad cada vez mayor, llegando a un punto de confluencia en el que la ciencia y la tecnología forman un binomio acelerador, como lo que se registra en las ciencias de la salud.
Las diversas disciplinas científicas como la biología y la química funcionaban de manera aislada en esquema de silos, pero existe una megatendencia denominada bio convergencia, generada a partir de la combinación de expertos, procesos y tecnologías como la biotecnología, software e ingeniería electrónica, creando un gran potencial para generar medicamentos y servicios, donde la planeación estratégica de mercado, asegurará la recuperación de las inversiones con las más altas ganancias posibles, ésta situación es lo que ha propiciado que el desarrollo de tecnológico no haya generado los beneficios suficientes para la sociedad, por lo tanto la desigualdad persiste, en consecuencia los más vulnerables serán los más afectados con la Policrisis.
Enfrentamos ya una severa crisis alimentaria global, dado que desde el conflicto Ucrania-Rusia se vive una escasez de alimentos, como de energéticos y de fertilizantes, lo que propiciará, en el corto plazo, que aumente la población que padece hambre; se avecina una crisis del costo de la vida, por la elevación de los precios de los alimentos, provocada por la inflación global.
Los desastres naturales se incrementarán debido a la falta de mitigación en el cambio climático, a ello habrá que sumarle la lucha por los recursos naturales, la pérdida de la biodiversidad y el colapso de los ecosistemas naturales, sin faltar la lucha por la apropiación de los minerales estratégicos, como los 14 minerales raros y no se diga la lucha por el litio, que ha sido la causa de conflictos políticos como los golpes de Estado, llamados blandos, para muestra está el de Bolivia, más violentos como en el Perú, y la crisis financiera-política de Argentina, sin dejar de mencionar el intento de bolsonaro para derrocar a Lula.
Cabe destacar que en la Policrisis que describe el Informe de los Riesgos Globales 2023, del Foro Económico de Davos, no se menciona la participación de corporativos trasnacionales como Twitter, ya bajo el mando de Elon Musk, que intervino en los conflictos de Bolivia, y su llegada a Monterrey en nuestro país, invirtiendo 10 mmd, su motivo es el litio, para las baterías de sus vehículos autónomos.
Para Roberto Bocca (Citado por Markovitz ob. cit) la actual crisis energética plantea la urgencia de reformar y reconstruir el sistema energético global, tanto por razones de sustentabilidad, como de seguridad y asequibilidad, la contribución del nuevo sistema energético es lograr el cero neto en 2050, vía eficiencia de los combustibles fósiles y sobretodo incrementar la producción global de energías limpias. Hacer viable este esquema debe significar nuevos mecanismos de los mercados, hacia un comercio justo.
La nueva economía global, está obligada a establecer el modelo de la economía circular a nivel global, dado que es un habilitador para fortalecer las estructuras económicas globales, sobre todo en las naciones más vulnerables para enfrentar la triple crisis del cambio climático, la biodiversidad y la contaminación, sin faltar la ciberseguridad. Difícil pero no imposible, mejor dicho no hay de otra.
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