Jóvenes mexicanos crean láminas biodegradables de plátano gracias al proyecto LAMBIO.
Estas estructuras pueden servir como alternativa al peligroso amianto, un compuesto cancerígeno ampliamente usado en la industria y los hogares
Jóvenes estudiantes del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos de Tabasco (Cecyte) en México han elaborado láminas biodegradables a partir de la fibra del tallo de la planta de plátano que podrían sustituir al peligrosoamianto. Este mineral, también conocido como asbesto, fue empleado durante décadas para aislar tuberías, recubrir paredes y tejados de las casas o a nivel industrial.
La comunidad científica, sin embargo, alertó hace años de la toxicidad del amianto. Las fibras de asbesto, al quedar flotando en el aire, pueden ser inhaladas fácilmente. Esto hace que lleguen hasta los pulmones debido a su diminuto tamaño, por lo que una exposición prolongada al amianto ha sido relacionada con un mayor riesgo de padecer cáncer de pulmón y un tumor poco frecuente como el mesotelioma.
Láminas completamente biodegradables
En ese sentido, según algunos estudios, la exposición ocupacional al asbesto causa más de 100.000 muertes al año. En España, por ejemplo, donde se importaron más de dos millones de toneladas de amianto entre 1906 y 2002, este compuesto cancerígeno seguirá provocando fallecimientos hasta 2040. EnMéxico, según datos de la UNAM, se han importado más de quinientas mil toneladas de asbesto.
Para evitar su uso, jóvenes mexicanos de quince años decidieron buscar una alternativa a este peligroso compuesto químico. Los estudiantes, que actualmente cursan su bachillerato, tuvieron la idea al estar tomando la materiaProcesos de frutas y hortalizas. En esta asignatura su profesor les comentó que solo se aprovecha el 12% de la planta del plátano, mientras que el 88% restante (fundamentalmente hoja, tallos y raíces) se desecha. A partir de ahí los alumnos decidieron impulsar un proyecto para investigar qué podía ser aprovechado de estos materiales. Así fue como llegaron a extraer la fibra del plátano, material de partida para estas láminas alternativas al amianto.
Como explicaron los estudiantes a CONACYT, “fue ahí cuando comenzaron las ideas, ya que descubrimos que la fibra es muy flexible y podía ser utilizada para emplearse para muchas cosas, no solo para láminas sino para otros materiales, pues cuenta con capacidades similares a las de comprimidos de madera, fue así que también empezamos a realizar sillas y mesas”.
Para fabricar las láminas alternativas al asbesto, los alumnos tuvieron que recolectar y limpiar el tallo de la planta de plátano. Después de trocear y moler la materia prima, los jóvenes obtuvieron la fibra que ha de mezclarse con resinas orgánicas. Así obtienen una masa que se moldea y seca para dar lugar a estas estructuras sin ningún riesgo para la salud, al ser producidas a partir de materiales orgánicos.
Las láminas son completamente biodegradables, por lo que al cabo de diez o quince años pueden ser trituradas y aprovechadas como abono. Según sus estimaciones, su precio es un 25% que las presentes actualmente en el mercado. Con la iniciativa LAMBIO, los alumnos también quieren ayudarse de labiotecnología para reutilizar una materia prima que solo en el estado de Tabasco genera 545 mil toneladas de desechos cada ocho meses.
El proyecto recibió un premio en ExpoCiencias 2015, además de quedar en segundo lugar en la Feria de Ciencias Internacional de Taiwán 2016, donde los estudiantes acudieron como únicos representantes de América Latina. Estos días también presentan LAMBIO en la Feria Internacional de Ciencia que se celebra en Túnez. Resultados que muestran el éxito de una investigación que busca ahora financiación y apoyo para seguir adelante y convertirse en una alternativa real al peligroso amianto.