Este logro podría terminar con las pruebas cosméticas en animales y erradicar la calvicie.
Las investigaciones en el desarrollo de piel sintética han logrado avances importantes durante el último año, sin embargo, se mantenía como una meta casi imposible el conseguir desarrollar un compuesto capaz de funcionar en su totalidad como la piel real, generando cabello, sudor y otras funciones de filtración propias de este órgano. Hasta ahora.
Un grupo de científicos japoneses del Centro RIKEN, dirigidos por el reconocido investigador Takashi Tsuji, ha logrado lo inconcebible, al desarrollar un tejido cutáneo artificial capaz de integrar glándulas sudoriparas y folículos para formar cabello, lo que abre una amplia gama de posibilidades, desde el fin de pruebas cosméticas en animales, hasta el posible desarrollo de un tratamiento de trasplante contra la calvicie:
Hasta ahora el desarrollo del tejido cutáneo artificial se había visto limitado por la falta de órganos importantes como el folículo piloso. Gracias a esta nueva técnica, hemos conseguido cultivar tejido cutáneo que mimetiza la función natural del tejido.
Como podemos observar en la imagen de arriba la apariencia del cabello luce poco natural y atractiva, pero aún así representa un gran logro. El truco para lograrlo consistió en tomar células de encías de ratones sanos, para luego convertirlas en formas similares a las células madre que generan la piel, e implantarlas en ratones con deficiencias del sistema inmunológico, que permitieron a la nueva piel crecer sin obstáculos.
Este nuevo método se encuentra en una etapa muy temprana, pero promete ser al antesala para grandes avances.