La ley de Muprhy es siempre caprichosa. Si estás comiendo una tostada y se te cae, lo hará por el lado de la mermelada; si tienes tu teléfono en el baño, en la playa, en la piscina o encima de la mesa, algo de agua le caerá seguro. ¿Qué pasa cuando se sumerge del todo? ¿Cómo puedes recuperarlo?
Que un móvil se te caiga al agua es siempre una nefasta noticia, no solo porque, de primeras, te quedas sin él durante un buen rato, sino porque, seguramente, nunca vuelva a ser el mismo.
Y es que el agua y, sobre todo, el agua marina, es uno de los principales enemigos de los teléfonos móviles, tan inteligentes ellos pero, a la vez, tan delicados y susceptibles y ser destruidos por una ola o una caída al váter.
Ahora, algunos de los terminales móviles más modernos ya llevan incorporados sistemas de protección contra el agua, con la certificación IP68, pero esta es para casos en los que se puedan mojar en la superficie. En el caso de que el teléfono móvil se sumerja en el agua, el problema es igual que para los que no tienen ese tipo de certificación.
Así pues, cuando te ocurra eso y no puedas combatir a la Ley de Murphy, te damos una serie de consejos básicos y que funcionan para que, al menos, le puedas hacer una reanimación asistida a tu teléfono móvil.
A nosotros la que más nos gusta es la última que te comentamos en el vídeo. Nos parece la opción más limpia y en la que, de hecho, algunas empresas españolas están apostando fuerte para crear productos relacionados y que ayuden a aquellas personas a las que se le ha caído el móvil al agua y no saben qué hacer. Eso sí, tendrás que tener suerte.
Fuente: Tecnoxplora