Aunque el cerebro de un especialista en memoria es diferente del de una persona “normal”, neurocientíficos comprueban que al cerebro se le puede entrenar.
¿Recuerdas el célebre Brain Training de Nintendo? Un juego de memoria en el que, a base de ejercicios visuales, de reflejos y de retención, se aseguraba que es posible “entrenar al cerebro” para que fuese más eficiente e, incluso, rejuveneciera. El entrenamiento mental funciona. Y un grupo de científicos ha demostrado que puede desarrollar la memoria.
Un grupo de neurocientíficos en el que se encuentra Boris Nikolai Konrad, un campeón en memoria con diferentes récords mundiales en retención mental de datos, ha demostrado cómo son de diferentes los cerebros de los especialistas en memoria de aquellos que no poseen tal capacidad para memorizar. Y establecieron métodos para que cualquiera se acercase a un campeón en memoria con un poco de entrenamiento diario.
Las conexiones cerebrales marcan la diferencia
Tras escanear los cerebros de 23 “campeones en memoria”, atletas mentales especialistas en recordar datos, descubrieron que su cerebro presentaba una red diferente de conexiones neuronales con respecto a una persona no habituada a ese tipo de esfuerzos cerebrales. Aunque, según han comprobado los científicos encargados del estudio, resulta posible entrenar a nuestro cerebro para que alcance una efectividad similar en términos de memoria. Con 30 minutos al día ejecutando ejercicios mentales se mejoran de manera notable las capacidades de retención.
La mnemotecnia es un proceso mental que nos permite recordar datos abstractos a base de relacionarlos con elementos conocidos y tangibles. Podemos memorizar nombres si les asociamos un color, un momento concreto… Y hacer lo mismo con números, orden de elementos y otros datos complicados de recordar. La mnemotecnia la utilizan los “campeones en memoria” para ejecutar el memorizado de datos en poco tiempo y de manera efectiva.
“Una buena memoria es algo que puedes aprender y a la que puedes entrenar“, comenta Martin Dresler, líder del estudio. “Y si utilizas estrategias para el entrenamiento mnemotécnico de memoria puedes incrementar realmente tu memoria, incluso si esta no es muy buena en el inicio“.
Los neurocientíficos analizaron los cerebros de los participantes en el estudio mediante escaneo por resonancia magnética y los fueron comparando con los datos reflejados por los campeones en memoria. El resultado fue espectacular: desarrollaron patrones cerebrales y conexiones neuronales a un nivel similar al de los especialistas.
Las reglas mnemotécnicas funcionan para listas de datos, pero no está claro si mejoran la memoria de uso diario
Los sujetos del estudio se sometieron a 6 semanas de entrenamiento con diferentes métodos mnemotécnicos y se contrastaron los resultados con una prueba posterior a los cuatro meses. El experimento concluye que cualquier persona puede entrenar su cerebro para recordar grandes listas de datos solo con conocer las herramientas necesarias y ejercitarlas a diario. Según los investigadores, los participantes desarrollaron patrones cerebrales como base neurobiológica para un mayor rendimiento de memoria.
Aunque se ha comprobado científicamente que el entrenamiento mnemotécnico permite mejorar la retención de datos, no está demasiado claro que eso ayude a la memoria que utilizamos a diario. Los beneficios se aplican a los casos donde utilizamos aposta las reglas mnemotécnicas, no a cuando asimilamos lo que nos rodea de manera natural. No obstante, los neurocientíficos han demostrado la plasticidad del cerebro y los cambios que se producen en las conexiones neuronales cuando forzamos la mente más allá de lo habitual.
Fuente: iD