Un norteamericano compró una granja en Michigan, al noreste de Estados Unidos, en 1988. Dentro había una roca que el antiguo propietario aseguró que era un meteorito que había caído allí en los años 30. El nuevo dueño vendió la granja unos años más tarde, pero se llevó con él la roca, que ha estado casi tres décadas usándose como tope de una puerta. Ahora, ha descubierto que, efectivamente, es un meteorito y que tiene un enorme valor.
Todo gracias a Mona Sirbescu, una profesora de geología de la Central Michigan University. Llevaba 18 años analizando rocas que personas de todo el país pensaban que eran meteoritos, pero su respuesta siempre era la misma: “No”. Hasta que llegó este ejemplar de poco más de 10 kilos y pudo cambiar su discurso: “Pude decir a ciencia cierta que era algo especial”.
En un comunicado de la universidad, Sirbescu asegura que es “el ejemplar más valioso que he tenido entre mis manos, económica y científicamente”. Su análisis determinó que pesa 10,2 kilos y está compuesto de un 88 por ciento de hierro y un 12 por ciento de níquel. Incluso se envió una muestra al Smithsonian Institution de Washington, que validó y confirmó su hallazgo.
Una roca que puede valer 100.000 dólares
En enero de 2018, un meteorito surcó los cielos de Michigan y muchas personas comenzaron a encontrar pequeños trozos que se habían desprendido. El dueño de esta roca, que quiere permanecer en el anonimato, se preguntó entonces en cuánto estaría valorado su ejemplar y un amigo que estudia geología fue quien le derivó a Mona Sirbescu. Es la sexta roca en tamaño de las encontradas en la historia del estado de Michigan, y eso le da un enorme valor.
Las opciones para él son dos: venderla a un museo para su exposición o a un particular para su colección. En cualquiera de los casos, la profesora de geología apunta a que su valor podría rondar los cien mil dólares y tanto el Smithsonian como un museo de minerales de Maine ya se han interesado por su compra. El propietario ha accedido a donar un diez por ciento de lo recaudado para la investigación en ciencias de la tierra y la atmósfera.
Fuente: elconfidencial.com