éxico espera un gran cargamento de la vacuna Sputnik V para inmunizar a su población. “Conversamos con el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin (…) y le agradecí por la decisión de enviarnos 24 millones de dosis de la vacuna Sputnik V para los próximos dos meses”, escribió en Twitter el presidente Andrés Manuel López Obrador el lunes pasado.
Sin embargo, el biológico ha creado dudas a nivel internacional, sobre todo, porque el gobierno ruso lo aprobó sin tener las pruebas de Fase 3. Esto es lo que sabemos (y no sabemos) de esta vacuna.
Fase 3 continúa
De acuerdo con un reporte publicado en la revista Nature, realizado por la Academia Nacional de los Linces, en Italia, la documentación clínica disponible sobre la vacuna Sputnik V preparada por el Instituto de Investigación Gamaleya, registrado en Rusia, se basa en un pequeño estudio clínico en el que participaron 76 voluntarios.
Sin embargo, todavía se está llevando a cabo un gran ensayo clínico posterior al registro en el que participaron más de 40,000 personas en Rusia. Esto también fue confirmado por el mismo instituto Gamaleya en un comunicado.
En noviembre de 2020, el Instituto de Investigación Gamaleya anunció que un análisis intermedio basado en 18,794 voluntarios que recibieron la primera y la segunda dosis de la vacuna Sputnik V mostró una eficacia del 91.4%, siete días después de la segunda dosis. Dos semanas después, la eficacia protectora fue superior al 95%.
Una dosis ¿suficiente?
A diferencia de la mayoría de las otras vacunas contra la Covid-19, que se administran en dos inyecciones del mismo producto, Sputnik V se basa en dos dosis administradas utilizando diferentes virus inactivos, conocidos como vectores.
El Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología de Gamaleya, de la Federación de Rusia, informó que los vectores son dos adenovirus de serotipo 26 (rAd26) y un vector de adenovirus recombinante de serotipo 5 (rAd5), ambos portadores del gen de la glicoproteína pico del SARS-CoV-2
El presidente ruso Vladimir Putin se ha referido a una opción de un solo componente como una “vacuna ligera”, que dijo que proporcionaría menos protección que los dos componentes, pero “aún alcanzará el 85%” de efectividad.
El Instituto de Biología de la Academia de Ciencias Médicas Militares anunció la aprobación (en pequeños grupos de población) de su vacuna vectorizada por adenovirus el 12 de agosto de 2020, antes de la Fase 3 clínica.
“Detallitos”
Hugo López Gatell, subsecretario de Salud mexicano, aseguró que primero se dará la aprobación por parte de la Comisión Federal contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para uso de emergencia, antes de que llegue a México.
“De hecho, la fecha exacta de llegada no la tenemos. Estamos a pocos días de que ocurra. Primero –antes de que llegue al territorio– debe tener como requisito el uso de emergencia, el cual está próximo a resolverse. Parte de las conversaciones con el gobierno ruso es para que se termine con cualquier detalle en la ficha técnica para liberar su autorización. Por ahora, lo que puedo decir. La parte sustantiva de Cofepris, el Comité de Moléculas nuevas dio una recomendación favorable a la autorización, es decir, la parte crucial ya ha sido resuelta. Solo faltan detalles para que haya un expediente en forma ”, dijo en conferencia de prensa este miércoles.
Adelantó que el transporte de la vacuna no estará incluido dentro del precio de 9.90 dólares y que el Ejército nacional podría ayudar a su transportación desde Rusia.
Argentina, Bolivia, Paraguay
La vacuna Sputnik ha sido aprobada en varios países de América Latina, los cuales alcanzaron un acuerdo con Rusia para suministrar más dosis.
El 30 de diciembre, Argentina aprobó la vacuna, mientras que el 20 de enero amplió el permiso para personas mayores de 60 años.
“La solicitud presentada tiene un saldo aceptable beneficio-riesgo, permitiendo por lo tanto sustentar el otorgamiento de la inscripción y autorización condicional”, Dijo la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) en un comunicado.
De hecho, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, recibió la primera dosis para los mayores de 60 años. Bolivia también le dio su visto bueno, al igual que Venezuela y Paraguay.
Fuente: tecreview.tec.mx