Hasta 24.000 kilómetros o, lo que es lo mismo, poco menos que cuatro veces la distancia entre Barcelona y Nueva York. Es la longitud del Great Trail, la pista de senderismo más grande del mundo. En construcción desde 1992, acaba de ser inaugurada en Canadá, país que recorre de este a oeste atravesando hasta 13 provincias. Para ello, se ha entretejido toda una red hilvanada con hasta 400 caminos libres de tráfico motorizado.
Los ciclistas, los apasionados de los deportes de nieve, de montar a caballo o, sencillamente, de dar una vuelta al aire libre, son bienvenidos en esta enorme arteria que se extiende desde San Juan de Terranova, en el extremo este del país, hasta Victoria, más allá de Vancouver, justo en la parte sudoeste de Canadá.
Entre un límite y otro del Great Trail, como se puede ver en este mapa, un desvío hacia el noroeste del país y a Yukon, para poder gozar, entre otros, de lugares tan excepcionales como el parque nacional de Kluane. Disfrutar de vistas como esas o sacarle aún más jugo a la infraestructura es posible, con actividades en su entorno como el ciclismo, la equitación, el esquí de fondo o a los mandos de una moto de nieve y, también, de un kayak.
De echo, para los amantes de las aventuras sobre (o bajo) el agua, por ella precisamente discurre algo más de un cuarto de este Great Trail, por lo que ponerse a los remos de una canoa o de un kayak es una experiencia más a sumar para quienes se animen a recorrer parte de esta red de senderos.
Dicen sus impulsores, la Trans Canadá Trail, que este macroproyecto en el que se embarcaron es un “verdadero regalo de los canadienses a los canadienses”. Tal vez por ello, cuatro de cada cinco ciudadanos de este país están a una distancia máxima de 30 minutos de alguno de los puntos de acceso al sendero.
¿Los objetivos para volcarse durante décadas en hacer realidad esta iniciativa? Varios. Entre ellos, la organización no gubernamental destaca el deseo de inspirar un modo de vida más activo entre los canadienses. La preservación de las zonas verdes del país y la apertura de una nueva ventana desde la que asomarse a su patrimonio natural, figuran también entre los fines del Great Trail. Servir como estímulo al turismo y, con ello, al empleo y la economía, es otro de los objetivos de este enorme oasis del senderismo y la naturaleza. Por ello, es también fácilmente accesible desde los principales aeropuertos del país.
A cargo del mantenimiento de las distintas secciones de este camino están organizaciones locales, autoridades provinciales, agencias nacionales y ayuntamientos de todo el país. Y , ¿a cargo de los locales y viajeros que se animen a explorar esta gigante pista de senderismo? Pues, además del mapa interactivo, una aplicación –The Great Trail App– disponible para Android y para iOS que lo pone más fácil para no perderse en este entramado natural de miles de kilómetros.