La empresa noruega Wind Catching Systems (WCS) ha hecho un debut espectacular con un colosal conjunto de aerogeneradores flotantes que, según dice, puede generar cinco veces la energía anual de las mayores turbinas individuales del mundo, al tiempo que reduce los costes lo suficiente como para ser inmediatamente competitivo con los precios de la red.
Con más de 324 metros de altura, estas gigantescas redes Windcatcher desplegarían múltiples turbinas más pequeñas (nada menos que 117 en las imágenes) en una formación escalonada sobre una plataforma flotante amarrada al fondo del océano usando sistemas de la industria del petróleo y el gas.
Según la WCS, uno solo de estos conjuntos podría ofrecer el doble de superficie de barrido que los mayores aerogeneradores convencionales del mundo -el Vestas V236 de 15 MW- y sus rotores más pequeños podrían funcionar mucho mejor con vientos de más de 40 a 43 km/h, cuando las turbinas más grandes suelen empezar a inclinar sus palas para limitar la producción y protegerse de los daños. El efecto global, según WCS, es un aumento del 500% en la producción anual de energía, con lo que cada conjunto produciría suficiente energía para abastecer a 80.000 hogares europeos.
En lugar de utilizar componentes individuales grandes, estos Windcatchers se construyen con piezas más pequeñas que son mucho más fáciles de trabajar. Una vez instalada la base flotante, la mayor parte del resto puede hacerse en cubierta, sin grúas ni embarcaciones especializadas, y el diseño de la red permite un fácil acceso para el mantenimiento continuo.
WCS afirma que estos conjuntos están preparados para una vida útil de 50 años, frente a los 30 años de una sola turbina grande.
La empresa afirma que está preparada para empezar a suministrar energía eólica marina a la par de la red, es decir, a un coste nivelado de la energía (LCOE, teniendo en cuenta los costes de capital) que iguala o supera el precio de la energía de la red.
Por tanto, seguirá siendo una forma relativamente cara de generar electricidad, sobre todo si se compara con la eólica terrestre y la solar, pero podría suponer un ahorro de costes para la eólica marina. Y la WCS afirma que sus proyecciones se basan en un tamaño de instalación inicial que cree que será mucho más económico a medida que se amplíe.
La empresa cuenta con el respaldo de las sociedades de inversión North Energy y Ferd, y ha desarrollado la tecnología junto con el proveedor de energía eólica marina Aibel y el Instituto de Tecnología Energética IFE.
WCS aún no ha dado más detalles sobre los prototipos o las primeras instalaciones, así que parece que tendremos que esperar algún tiempo antes de que demuestre sus bondades.
Más información: windcatching.com