Un equipo de investigadores en el Reino Unido ha desarrollado un sistema habilitado para inteligencia artificial totalmente automatizado que puede escanear imágenes de la retina en busca de salud vascular, lo que ayuda a identificar a las personas con alto riesgo de enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular.
El viejo adagio “los ojos son las ventanas del alma” no está tan lejos cuando se considera cuánto se puede inferir sobre la salud general de una persona al estudiar sus ojos. Enfermedades como la artritis reumatoide y el hipertiroidismo se pueden detectar en los ojos, y las innovaciones recientes sugieren que las enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson podrían diagnosticarse a través del escaneo de la retina.
El sistema de IA se llama QUARTZ (Análisis cuantitativo de la topología y el tamaño de los vasos de la retina) y un nuevo estudio puso a prueba el algoritmo en más de 88 000 imágenes de la retina de dos grandes estudios de salud de la población en curso. Cada persona incluida en el estudio tenía un promedio de siete a nueve años de datos de seguimiento, lo que permite a los investigadores evaluar la capacidad predictiva del sistema.
Los resultados mostraron que el sistema impulsado por IA (cuando se incorpora con la edad, el sexo, el tabaquismo y el historial médico) podría generar puntajes de riesgo de accidente cerebrovascular y enfermedad cardíaca a 10 años equivalentes a una de las herramientas de diagnóstico más comúnmente utilizadas llamada Framingham Risk Score ( NFR). Debido a que los diagnósticos de FRS requieren análisis de sangre y medición de la presión arterial, la facilidad de una técnica de exploración ocular automatizada para llegar a conclusiones similares significaría que se podría monitorear mejor a más personas si la tecnología se implementara ampliamente.
Los investigadores señalan que la mayoría de las imágenes de la retina evaluadas en el estudio fueron capturadas por “personal no experto”. Por lo tanto, los resultados podrían mejorarse potencialmente utilizando mejores técnicas de imagen de los profesionales de la salud. Sin embargo, por otro lado, la eficacia de las imágenes retinianas menos complejas apunta a la posibilidad de que este tipo de tecnología se incorpore a una aplicación para teléfonos inteligentes.
En un comentario adjunto de dos investigadores de la Universidad de Dundee que no trabajaron en el nuevo estudio, se analizan las implicaciones clínicas de este tipo de herramienta. El comentario sugiere que se deben tener discusiones serias para determinar cómo esta información de diagnóstico podría afectar la práctica clínica.
¿Estas herramientas deberían estar restringidas a oftalmólogos o médicos? Si una de estas herramientas marca a un paciente como de alto riesgo, ¿cuáles son los seguimientos clínicos necesarios? ¿Qué significaría la disponibilidad generalizada de una herramienta como esta para los sistemas de salud actuales? ¿Muchos pacientes nuevos inundarían repentinamente las clínicas debido a las preocupaciones sobre los riesgos señalados por una aplicación de teléfono inteligente?
“Lo que ahora se necesita es que oftalmólogos, cardiólogos, médicos de atención primaria e informáticos trabajen juntos para diseñar estudios para determinar si el uso de esta información mejora el resultado clínico y, de ser así, trabajar con los organismos reguladores, las sociedades científicas y los sistemas de salud para optimice los flujos de trabajo clínicos y permita la implementación práctica en la práctica de rutina”, concluye el comentario.
La nueva investigación fue publicada en el British Journal of Ophthalmology .
Fuente:
Haridy, R. (2022, 7 octubre). AI-enabled eye scan delivers stroke and heart disease risk scores. New Atlas. Recuperado 7 de octubre de 2022, de https://newatlas.com/health-wellbeing/ai-eye-scan-stroke-heart-disease-risk-scores/