Unos investigadores han encontrado una nueva forma de aliviar el dolor en puntos concretos del cuerpo.
El novedoso sistema utiliza ultrasonidos que activan la liberación de ciertos fármacos, inyectados con antelación en lugares específicos del cuerpo. Estos medicamentos bloquean los nervios. De este modo, basta emitir una señal ultrasónica para mitigar el dolor.
El trabajo de investigación y desarrollo es obra de un equipo integrado, entre otros, por Alina Rwei y Daniel Kohane, del Hospital Pediátrico de Boston en Estados Unidos, así como María Vallet Regí y Juan L. Paris, de la Universidad Complutense de Madrid en España.
Uno de los aspectos más interesantes sobre este sistema es, tal como señala Rwei, que se puede controlar el grado de bloqueo nervioso mediante el ajuste de la duración y la intensidad de los ultrasonidos.
Los dispositivos emisores de ultrasonidos están disponibles comercialmente y se usan ampliamente en varios ámbitos terapéuticos, lo que los convierte en una tecnología atractiva para ser usada como activador de fármacos.
En el futuro, los pacientes podrían recibir una inyección en el hospital, y después traer a casa un pequeño dispositivo portátil de ultrasonidos para activar el analgésico. Esto podría permitir a los pacientes controlar el efecto analgésico a voluntad, sin necesidad de inyecciones continuadas u otras formas convencionales de administración durante el periodo de tratamiento.
Para crear el sistema analgésico activado por ultrasonidos, el equipo de Kohane desarrolló liposomas, unos saquitos artificiales que tienen un tamaño de micrómetros, y los llenaron con un fármaco que bloquea los nervios. Las paredes de los liposomas contienen pequeñas moléculas que son sensibles a los ultrasonidos.
Una vez son inyectados dichos liposomas llenos de fármaco, se pueden aplicar ultrasonidos que penetran en el tejido y causan que las moléculas que son sensibles a ellos produzcan una especie reactiva del oxígeno, la cual reacciona con los lípidos en las paredes de los liposomas. Esto abre su superficie y libera el fármaco analgésico en el tejido local, reduciendo el dolor.
Fuente: NCYT