Un equipo de investigadores de la Clínica Mayo desarrolló un nuevo tipo de nanopartícula que encoge los tumores del cáncer de mama y evita la recurrencia del mal reclutando a todo el sistema inmunitario, informó hoy la institución médica estadounidense en un comunicado divulgado en Ciudad de México.
En un estudio publicado recientemente en la revista Nature Nanotechnology el equipo observó una reducción de 70% a 80% en el tamaño de los tumores en ratones a los que se les inyectó la nanopartícula, señaló el texto.
Lo más importante fue que los ratones tratados mostraron resistencia a la futura recurrencia del tumor, incluso después de exponerlos a células cancerosas un mes más tarde.
Los resultados muestran que la nanopartícula provocó potentes respuestas inmunológicas contra el tumor del cáncer de mama HER2 positivo, que crece agresivamente y se disemina más rápido que otros tumores.
“En este estudio prototipo, fue asombroso descubrir que los animales tratados con estas nanopartículas mostraron un efecto duradero contra el cáncer”, comentó la doctora Betty Kim, investigadora principal del estudio, neurocirujana y neurocientífica especializada en tumores cerebrales de la sede de la Clínica Mayo en Florida.
Expuso que a diferencia de las inmunoterapias anticancerígenas existentes que apuntan sólo hacia una parte del sistema inmunitario, “este nanomaterial creado a medida se involucró activamente con todo el sistema para eliminar a las células cancerosas, lo que dio pie a que el cuerpo cree su propio sistema de recordación para minimizar la recurrencia”.
“Estas nanomedicinas pueden ampliarse para atacar diferentes tipos de cáncer y otras enfermedades de los humanos, incluidos trastornos neurodegenerativos y neurovasculares”, abundó.
La nanopartícula está recubierta de anticuerpos que apuntan contra el receptor del HER2, molécula común que se encuentra en 40% del cáncer de mama.
Las moléculas adheridas a la nanopartícula aceleran a las células encargadas de la limpieza del cuerpo, conocidas como macrófagos y fagocitos, pertenecientes al sistema inmunitario. El diseño de la nanopartícula provoca la presencia de un gran número de estas células que se deshacen de las células cancerosas.
Luego, estas células de limpieza pueden informar sobre las células cancerosas a las altamente especializadas células T del sistema inmunitario a fin de que ayuden a erradicar a las células cancerosas restantes, y simultáneamente mantienen el recuerdo de esas células para evitar la recurrencia del cáncer.
El establecimiento de un recuerdo de lucha contra la enfermedad en las células es lo que hace a la nanopartícula similar a una vacuna contra el cáncer, indicó el comunicado.
“Desarrollamos una nueva plataforma que alcanza a las células tumorales y al mismo tiempo recluta abundantes células de limpieza para obtener una potente respuesta inmunitaria”, explicó la doctora Kim.
De acuerdo con la experta, “ese método quizás abra nuevas puertas para el diseño de novedosas inmunoterapias basadas en la nanomedicina”.
Fuente: EFE