Un equipo de investigación, integrado por un científico de la UTN, desentrañó la relación que existe entre una proteína “Mitf” y la proliferación de melanoma, que es el cáncer de piel más peligroso. El trabajo podría conducir, en el futuro, al desarrollo de fármacos más efectivos y al diseño de terapias nuevas.Los científicos revelaron que MITF impide que se complete la conformación de los lisosomas: especie de “bolsas” dentro de las células que cumplen la función de reciclar las proteínas dañadas y regenerarlas. Los lisosomas afectados no podrían cumplir su función de limpiar las células y, en consecuencia, favorecerían la metástasis o diseminación del melanoma. Otro avance de la investigación permitió conocer que esa proteína estimulaba una vía de señalización, la del Wnt, que está vinculada al cáncer.
El autor del trabajo es Diego Ploper (38), egresado de la Licenciatura en Química en la Universidad Nacional de Tucumán (UNT). La investigación se desarrolló en el laboratorio de Edward De Robertis, en la Universidad de California (UCLA), en Los Ángeles, donde Ploper se doctoró en Química bajo su dirección. Actualmente, Ploper se integró al Instituto Superior de Investigaciones Biológicas (INSIBIO), de doble dependencia entre la UNT y el Conicet (Argentina).
El equipo experimentó con líneas celulares de melanoma de pacientes del Hospital de UCLA y también con modelos de embriones de ranas (Xenopus laevis). La investigación fue publicada recientemente en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) de los Estados Unidos.
Ploper reivindicó la importancia de la ciencia básica. “Antes de aplicar algo a un sistema, ya sea para curarlo o para desarrollar tecnologías, uno debe adquirir un entendimiento profundo de cómo funciona ese sistema”, indicó. Por ese motivo, se mostró esperanzado en que su trabajo en el futuro pueda servir de base para apuntar a nuevos blancos terapéuticos.
Las cifras sobre cáncer de piel están en franco incremento en el mundo en los últimos 30 años. Según la Fundación Internacional Cáncer de Piel, se estima que uno de cada cinco habitantes desarrollará esta enfermedad en el transcurso de su vida (es decir el 20% de la población). Es el más común de los cánceres; y el melanoma -si bien es el menos frecuente- es el que más muertes produce entre los de piel.
Una curiosa relación entre Parkinson y melanoma fue avalada por numerosas investigaciones científicas y es que los pacientes con melanoma multiplican por cuatro el riesgo de desarrollar Parkinson y viceversa, pero aún se desconocen las causas de esa probabilidad.
Ploper se unió al INSIBIO con la idea de aportar sus conocimientos en melanoma a las líneas de investigación de Parkinson que se siguen en Tucumán. Supone que la proteína Mitf está involucrada en la muerte de las neuronas. Su hipótesis es que estimula la producción de otra proteína, la alfa-sinucleína (AS), que tiende a agregarse y a formar fibras neurotóxicas que desencadenan el Parkinson. Otra conjetura es que, de manera similar al caso del melanoma, la alteración de los lisosomas vuelve más difícil degradar esas fibras nocivas.
El joven investigador estima que su trabajo se facilitará con los nuevos microscopios adquiridos por la Universidad y con la próxima creación de un instituto especializado en cultivos celulares, que tendrá triple dependencia entre el CONICET, la UNT y el Ministerio de Salud de la Provincia.
Fuente: Argentina Investiga