El dron toma fotografías de las parcelas que después son analizadas para determinar a través de procesos de visión por computadora la cantidad de plantas que hay.
El Agro Drone, es un proyecto en el área de muestreos de campo de rendimiento en mejora genética desarrollado por la empresa jalisciense Inbright, especializada en dar soluciones a este y otro tipo de problemas en distintas áreas, que van desde agricultura hasta detección de incendios y vigilancia, a través del uso de drones.
El dron sobrevuela el campo de maíz. Toma fotografías de las parcelas que después son analizadas para determinar a través de procesos de visión por computadora la cantidad de plantas que hay, la distancia entre estas, su altura y vigor, entre otras variables. Toda esta información servirá al dueño de esas parcelas para determinar la calidad de sus cultivos.
En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, el ingeniero David Leonardo Castillo Herrera, fundador de Inbright, señaló que el equipo diseña los sistemas de control de vuelo, manejo de datos y algoritmos de visión por computadora, actividad en la cual son apoyados por expertos del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav) Unidad Guadalajara.
A pesar de que hay una cantidad importante de empresas que brindan el servicio de monitoreo con drones a través de fotografías, Castillo Herrera señala que el plus que da Inbright reside en el proceso de análisis de la información obtenida a través de visión por computadora.
“El dueño tiene en sus parcelas cierto material genético y necesita medir de manera muy precisa la información, porque con base en eso determina qué planta es mejor que otra para sembrar la siguiente generación“, mencionó el ingeniero.
Actualmente este proceso se mide a mano, por lo que una persona puede tardar hasta un mes en sacar toda la información de una hectárea de terreno sembrado, mientras que el dron tarda un total de siete minutos en la misma extensión de terreno. Por día, el Agro Drone puede monitorear y entregar la estadística completa de hasta tres hectáreas de terreno, especificando número de plantas, altura, vigor, distancia y floración, clasificado por parcelas, líneas o surcos.
“Con ciertos algoritmos creamos un camino que garantice que se va a cubrir el área completa, que no se repetirán tramos y que podremos hacer eficiente el uso de la batería. También eliminamos los errores humanos en el proceso, porque con el dron de manera objetiva medimos siempre lo mismo: mismos algoritmos, mismo dron, mismas tomas, misma altura, etcétera“.
En tanto, señaló que la cámara utilizada por el dron es de un teléfono celular Nokia Lumia, cuyas imágenes se integran posteriormente en un mosaico. “Lo que importa es la aplicación de algoritmos, lo que nos evita gastar recursos en más tecnología en cámaras“, apuntó.
Otro de los productos que están desarrollando es el Fire Drone, el cual se especializa en la detección de incendios en un área determinada, a través de la utilización de cámaras térmicas. Este artefacto está previsto para que pueda cubrir tres funciones: prevención de incendios, combate de incendios y recuento de daños. Al momento se encuentra bajo estudios de factibilidad técnica.
“Este dron utiliza una cámara térmica con la cual podemos encontrar el incendio y saber la velocidad que lleva, basados en la velocidad del viento. También podemos monitorear un área de 30 kilómetros cuadrados, detectar fuego a un kilómetro de distancia y determinar el camino que recorrería el fuego de iniciarse un incendio, con base en algoritmos, tomando en cuenta también los tonos de la maleza, como amarillos y rojos. Esta es información valiosa para los brigadistas porque procuran no poner en riesgo la vida de ellos ni de otras personas“, aseguró el ingeniero.
Hasta ahora la Comisión Nacional Forestal (Conafor) ha demostrado su interés en el proyecto para contar con una o hasta dos unidades en varios estados del país; así también otras empresas del rubro en San Francisco y California, Estados Unidos, están en pláticas para hacerse de estos drones.
Aunque para utilizar ambos equipos se requiere de una capacitación, los drones son completamente autónomos, por lo que no necesitan intervención de una persona para su funcionamiento, acotó Castillo Herrera.