Con el objetivo de fomentar el geoturismo, la creación del conocimiento científico y el desarrollo social y económico de las comunidades, la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) diseñan el proyecto del Geoparque de la Comarca Minera, el cual busca ser reconocido internacionalmente.
La Comarca Minera abarca los municipios hidalguenses de Pachuca de Soto, Mineral de la Reforma, Epazoyucan, Singuilucan, Mineral del Monte, Mineral del Chico, Atotonilco el Grande, Omitlán de Juárez y Huasca de Ocampo, con lo que suma dos mil kilómetros cuadrados y aproximadamente 400 mil habitantes, lo que lo convertiría en el geoparque más poblado del mundo.
De acuerdo con un comunicado de prensa de la UAEH, la región elegida para el geoparque tiene importancia geológica por su ubicación entre la faja volcánica transmexicana y la Sierra Madre Oriental. “Está anclada en el mayor depósito de obsidiana del mundo e incluiría una parte de la Reserva de la Biosfera de Metztitlán (Huasca y Atotonilco) y el parque nacional de El Chico”.
En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, los doctores Enrique Cruz Chávez y Marius Ramírez Cardona, adscritos al área académica de Ciencias de la Tierra de la UAEH, explicaron a detalle en qué consiste el proyecto, así como el proceso que seguirán para obtener la distinción de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés) para formar parte de la Red Mundial de Geoparques.
Geoturismo como detonador de desarrollo
De acuerdo con la Unesco, un geoparque global “es una zona protegida que cuenta con un patrimonio geológico de importancia internacional, y que cumple asimismo con criterios de unidad y estética”.
ctualmente existen 111 geoparques en el mundo y tres de ellos están en el continente americano en Uruguay, Brasil y Canadá; por lo que, si el grupo de investigación logra la distinción de la Unesco, este lugar se convertirá en el primer geoparque en México.
Un geoparque, explica Cruz Chávez, es “un área geográfica que se distingue por su geodiversidad, es decir, por su riqueza en la cuestión geológica”. Asimismo, esta zona se enriquece con base en características morfológicas, de diversidad geológica, culturales e históricas.
“Las características del terreno y la amplia geodiversidad de los sitios que conforman el proyecto nos lleva a pensar que podemos integrar el primer geoparque en el país”, agregó Ramírez Cardona.
De acuerdo con un artículo del investigador José Luis Palacio Prieto del Instituto de Geografía de la UNAM, los geoparques tienen tres objetivos fundamentales: protección del ambiente, educación formal e informal y detonador del desarrollo económico local.
En 2011, investigadores de la Universidad Politécnica de Cataluña y de la UNAM visitaron la zona y ahí surgió la idea de crear un geoparque debido a las características del terreno del estado de Hidalgo; así fue como se denominó la “Comarca Minera”.
A raíz de dicha visita, el grupo conformado por Ramírez Cardona y Cruz Chávez se asesoró con expertos en la materia de la Universidad Autónoma de Barcelona y la Universidad Politécnica de Cataluña. “A partir de ello existió un intercambio de ideas que nos permitió describir cada uno de los sitios y definir los estándares que la Unesco marca para la creación de estos parques”, señaló Cruz Chávez.
Actualmente existe una tendencia mundial denominada “geoturismo”. Según una definición expuesta por Javier Gaitán y José Juan Cano, del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), el geoturismo es “una actividad recreativa con fines culturales y educativos en donde los principales sujetos o atracciones son la geología y la geomorfología de los paisajes; estos lugares son sujetos de visitas y recorridos (…) que motiven la educación geo-científica, estimulando al mismo tiempo la economía de dichos sitios”.
En palabras de los investigadores, México debe ser reconocido por ser un destino turístico cultural, lo que derivará en algunos años en una mayor captación económica a partir de la distinción de la Unesco.
La idea central del desarrollo de este proyecto es aprovechar todos aquellos geositios que se encuentran en dicha área del estado de Hidalgo y crear “museos vivos”. En total serán 30 los geositios que formarán parte de las seis rutas que integrarán el Geoparque de la Comarca Minera.
En este sentido, el doctor Ramírez Cardona explicó durante la entrevista que la importancia de la creación del Geoparque de la Comarca Minera radica en el aprovechamiento y valoración de la infraestructura educativa y turística que ya existe. “Buscamos además que el desarrollo de este territorio permita el geoturismo como una actividad económica sustentable”.
Otro de los fines de la creación de este geoparque es la generación de identidad en la población que habita la zona. “Queremos que las personas se sientan parte de la Comarca Minera porque el territorio tiene valores geológicos, mineros, históricos, culturales, gastronómicos”, puntualizó.
El proyecto, de manera inicial, estuvo conformado por investigadores de la UNAM y la UAEH. Actualmente está integrado por biólogos, ingenieros ambientales, especialistas en ciencias de la educación, arqueólogos, entre otros. “Somos un grupo conformado también por más de diez estudiantes en formación a punto de egresar de carreras de corte ambiental y biológico”, detalló Cruz Chávez. Asimismo, el grupo del proyecto es asesorado por expertos de la Universidad Politécnica de Cataluña y la Universidad Autónoma de Barcelona.
“El trabajo interuniversitario es el germen del proyecto y este evoluciona y está vivo. Si el proyecto es elegido para formar parte de la Red Global de Geoparques, delegaremos la gestión administrativa al tejido social de la Comarca Minera”, refirió Ramírez Cardona. Las universidades tendrán el papel de apoyo o asesorías a nivel de generación y producción de conocimiento, de material didáctico y de formación de recursos humanos de alta especialización.
Distinción de la Unesco y planes a futuro
Una de las líneas más importantes del proyecto del Geoparque de la Comarca Minera es el desarrollo de un plan educativo que permita que las personas que trabajan como guía de turistas tengan información clara y concisa de lo que transmiten. “Tenemos también programas de educación formal a diversos niveles, desde primaria hasta universidad. Todo alineado con los valores de educación que la Unesco valora”, explicó Ramírez Cardona.
Se tiene además un plan de educación relacionado con las ciencias de la Tierra con el objetivo de buscar un desarrollo amigable con la naturaleza. “Conocimiento más respeto a la naturaleza y su entorno es nuestra filosofía”, dijo.
En septiembre de este año mostrarán el proyecto en un foro que se celebrará en Finlandia con el fin de dar a conocer los avances y, posteriormente, en octubre presentarán oficialmente la candidatura en París ante la Unesco.
“La evaluación será en febrero de 2016 y en abril de ese año tendremos una visita de los evaluadores de la Unesco en donde revisarán que se cumplan los requerimientos y estándares que solicitan. Esperemos que en julio nos den un dictamen que apruebe el proyecto”, explicó Cruz Chávez.
Los investigadores reconocen que es una gestión larga y de trabajo en conjunto entre las dos entidades universitarias, pero que la obtención del reconocimiento permitirá el desarrollo económico y social de las comunidades, la difusión del geoturismo, la conservación del medio y el desarrollo de la identidad.
Consideran que los beneficios que obtendrá México de esta alianza entre universidades derivará en una red mexicana o latinoamericana que promueva “este tipo de acciones encaminadas a reconocer estos territorios con singularidades geológicas”, finaliza Ramírez Cardona.
Ameyalli Villafán
Septiembre 2016
Fuente: CONACYT