Un grupo de investigadores internacionales están desarrollando nuevas y eficientes máquinas térmicas aire-tierra capaces de seleccionar la fuente en función de las condiciones climáticas.
Las nuevas bombas de calor son capaces de usar diferentes fuentes para responder eficientemente a las diferentes condiciones climáticas.
Con este es objetivo, GEOTeCH es el mayor proyecto europeo de este tipo nacido bajo Horizon 2020 de la Unión Europea. La iniciativa reúne las experiencias de 16 socios, tanto de la industria como del mundo académico, incluyendo importantes empresas italianas como la Universidad de Padua y el Alma Mater de Bolonia. Juntos, el equipo de investigadores está tratando de promover un mayor uso de la calefacción y refrigeración renovables a través de sistemas geotérmicos de superficie rentables. ¿Cómo? Con una máquina térmica de doble fuente de calor, capaz de trabajar con alta eficiencia independientemente de las condiciones climáticas.
Así nacieron las bombas de calor de doble fuente, que usan tanto la tierra como el aire: dependiendo del clima y de la necesidad de calefacción o refrigeración, el sistema determina la mejor fuente y, así, funciona como bomba de calor aire-agua o geotérmica. El sistema también es capaz de suministrar agua caliente durante todo el año (durante el verano lo hace utilizando el calor de drenaje de condensado del sistema).
Para ello, el consorcio GEOTeCH ha desarrollado tecnologías innovadoras de perforación en seco y ha mejorado la eficiencia del intercambiador de calor, así como también ha trabajado en soluciones de sistemas y tecnologías de control. El resultado se está probando ahora en cuatro lugares seleccionados a nivel europeo por sus diferentes condiciones climáticas.
“La energía geotérmica es el futuro: es una fuente de energía limpia y sostenible y no produce gases de efecto invernadero que puedan ser perjudiciales para la atmósfera“, explica el profesor Rick Greenough, de la Universidad Británica De Montfort University Leicester, socio del proyecto. “La gente piensa erróneamente que estas bombas de calor son caras y que se necesita mucho espacio para instalarlas, pero no tiene por qué ser así.”
En realidad, el proyecto persigue dos soluciones diferentes: un pequeño sistema (hasta 50 kW) adecuado para casas unifamiliares y pequeños edificios terciarios (escuelas, museos, oficinas…) y un sistema más grande (más de 100 kW) para edificios más grandes.
Fuente: Ecoinventos