La industria aérea sigue evolucionando. No sólo se trata de nuevos aviones, con materiales más ligeros y resistentes o motores más potentes y ecológicos, el sistema como tal necesita innovación para las diversas áreas que gestiona: control de tránsito aéreo, aeropuertos, pasajeros y confort a bordo. Todo ello está siendo atendido por una industria que crece día con día y cuyo impacto en la economía es cada vez más importante.
Después de la desaparición del Boeing 777 de Malaysian Airlines (MH370), ocurrido en el 2014, misterio que sigue sin resolverse, se ha desarrollado nueva tecnología para mantener conectadas a las aeronaves continuamente. De hecho, ya existe una especie de wize del aire que ha desarrollado la empresa de tecnología SITA, fundada en 1949 por un grupo de aerolíneas, y que hoy es vanguardia en todo el mundo por el desarrollo de sistemas tanto para apoyo en aire como en tierra.
Este sistema de colaboración entre diversas aeronaves, que está montado en la plataforma que SITA provee, permite también identificar las zonas de turbulencia (sobre todo las llamadas de “aire claro”, que no son fácilmente identificables) para que el resto de las aeronaves que cruza un espacio aéreo determinado tenga alertas tempranas que les permitan hacer un vuelo más seguro.
En el asunto de los aeropuertos y el manejo de equipaje, hoy por hoy uno de los retos más importantes para el transporte aéreo, se están habilitando sistemas más eficientes, por ejemplo, para hacer el trámite de documentación de pasajeros y equipaje que pueden ya hacerse en línea y en los quioscos de los aeropuertos, lo que ahorra mucho tiempo. Para el 2021 se espera que casi 95% de los aeropuertos del mundo cuenten ya con estos sistemas perfectamente integrados y que información crítica, como las demoras, cancelaciones o incluso sobreventas, puedan ser informados directamente a los pasajeros en sus dispositivos móviles.
También la documentación de equipaje es un proceso que poco a poco se va haciendo autogestivo, de forma que más o menos en tres años este servicio estará disponible en 78% de los aeropuertos. No sólo es el trámite a la entrega sino el seguimiento continuo de las maletas, que también se está perfeccionando, por ejemplo, a través de chips que muestren en todo momento el itinerario que sigue una pieza para evitar que se pierda.
Pero uno de los productos estrella es el reconocimiento biométrico que permitirá a los aeropuertos y sobre todo a las autoridades migratorias evitar las largas colas de viajeros para revisar pasaportes y a los pasajeros circular más rápido y sin las molestas supervisiones que hoy en día hacen odiosas a las terminales aéreas (¡y no se diga a los revisores!). Se estima que para el año 2025 68% de los pasajeros aéreos estén en esta modalidad.
Blockchain & IoT es un concepto que también está revolucionando la gestión aeroportuaria que se había vuelto muy difícil, tanto por razones de seguridad como por el constante crecimiento del sector transporte aéreo que plantea retos inmensos a los operadores de las terminales aéreas. Esto significa unir el llamado internet de las cosas (la conexión directa entre dispositivos) con el blockchain para el almacenamiento, transmisión y confirmación de datos. Este binomio permite reducir costos y gestionar de forma más confiable el manejo de vuelos, pasajeros, carga, equipaje y demás, porque proporciona un nivel de seguridad muy elevado y permite predecir contingencias como retrasos y cancelaciones por clima, incluso por vencimientos de jornada o fallas de mantenimiento.
Las plataformas de SITA son monitoreadas desde sus centros de control en Montreal y Singapur y proporcionan a las aerolíneas y a los aeropuertos no sólo un considerable ahorro sino una garantía de seguridad que sin duda está poniendo ejemplo a nivel global.
Fuente:
Rosario Avilés, R. A. (2019, 1 octubre). La tecnología está llegando. Recuperado 2 octubre, 2019, de https://www.eleconomista.com.mx/opinion/La-tecnologia-esta-llegando-20191001-0004.html