¿El mejor sistema de almacenamiento de energía para el coche eléctrico del futuro? Un dispositivo híbrido que combina el almacenamiento electroquímico con el almacenamiento puramente eléctrico. La idea surgió de la empresa francesa NAWA Technologies, que ha diseñado nuevos supercondensadores de carbono. Bautizados como Ultra Fast Carbon, los nuevos ultracondensadores prometen costes más bajos que otros dispositivos similares y cinco veces más potencia. Y como todos los supercondensadores, pueden cargarse y descargarse en segundos durante más de un millón de ciclos sin pérdida de rendimiento.
Los supercondensadores almacenan energía en un campo eléctrico. Esto permite alcanzar velocidades de carga y descarga espectaculares (hasta 1.000 veces más rápidas) que las baterías. Y como no hay reacción química, sólo una separación física de protones y electrones, la tasa de carga no causa ninguna acumulación de calor o deformación del dispositivo. Gracias a su muy baja resistencia interna (hasta 0,12 mΩ), también pueden trabajar con una eficiencia cercana al 100 %. En principio, también son mucho más ligeros que las baterías y, por lo general, no contienen productos químicos nocivos ni metales tóxicos.
La clave del rendimiento de NAWA reside en el diseño y en un proceso de fabricación que minimiza el impacto medioambiental. Las unidades Ultra Fast Carbon están equipadas con electrodos compuestos de nanotubos de carbono y grafeno alineados verticalmente que pueden fabricarse con “el mismo proceso usado para fabricar paneles fotovoltaicos – explica el fundador de la empresa Pascal Boulanger – probado, altamente eficiente y económico.
La tecnología no está exenta de problemas y puntos débiles, empezando, por supuesto, por la densidad de energía. Los supercondensadores retienen sólo alrededor del 25 % de la energía por unidad de peso que puede ser almacenada por una batería de litio. Sustituir los actuales dispositivos de almacenamiento de los coches eléctricos por ultracondensadores del mismo tamaño significaría tener sólo una cuarta parte de la carga.
Por ello, el equipo de NAWA está convencido de que todo el potencial de los nuevos supercondensadores de carbono, al menos en el campo de la electromovilidad, sólo puede alcanzarse en combinación con baterías de iones convencionales. Este tipo de sistema híbrido también tiene la ventaja de poder aprovechar al máximo el frenado regenerativo. “La mayor parte de la energía en el frenado regenerativo se pierde en forma de calor, aproximadamente el 80 %” debido a la incapacidad de las baterías para la recarga rápida.
También hay otras áreas en las que un ultracondensador de carbono podría ser útil: la empresa ya está trabajando con fabricantes de herramientas eléctricas industriales y la industria de la robótica, incluyendo un proyecto dedicado al uso de vehículos autónomos en almacenes.
Fuente: Ecoinventos