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Las grandes tecnológicas compiten con empresas de automóviles para innovar en los futuros sistemas de transporte
En un mundo cada vez más afectado por la contaminación, consecuencia de grandes atascos y de la circulación de los vehículos motorizados, son cada vez más las propuestas de vehículos eléctricos que causen el mínimo impacto medioambiental posible.
El economista Tony Sebaes se atreve a afirmar que, para 2050, los coches con motor de combustión interna pasarán a formar parte de colecciones de museos. Además, los conductores pasarán a la historia y, con la desaparición del factor humano, sostiene que las muertes en carretera disminuirán.
¿Cómo será el transporte en el futuro?
No veremos coches voladores, no. Al menos en varias décadas. A pesar de que para muchas empresas no es difícil crear un prototipo, la población necesitaría una nueva educación vial y habría que calcular muchos riesgos. El futuro va encaminado, más bien, a la autonomía.
Según varios expertos, la futura movilidad estará en el software no en el hardware. El combustible de los vehículos serán los datos. De esta manera, los investigadores sostienen que el transporte alcanzarán las siguientes metas:
– Transporte bajo demanda. Gracias a las tarjetas de movilidad inteligentes y a las aplicaciones, las compañías pueden ver quién viaja, cuándo y dónde. Estas estadísticas permitirán que predigan la futura demanda. Las grandes aglomeraciones de vehículos acabarán.
– El transporte desde una aplicación. En la actualidad, utilizamos una aplicación para elegir nuestro destino, otra para reservar billetes y una tercera para consultar los horarios de salida. En el futuro, una sola aplicación englobará todos estos modos.
– Transporte personalizado. Imagina que te envían una alerta al móvil avisándote de que hay un retraso en el tren o autobús que sueles coger y, como compensación, te ofrece un descuento en bebidas calientes en el bar más cercano a la estación. El sistema de transporte se anticipará a nosotros.
– Tú eres tu propio billete. Por ejemplo, Siemens introdujo en 2018 BiBo en el transporte suizo. Un sistema online que te registra automática y digitalmente cuando entras y sales del medio de transporte. Se acabaron los billetes y las tarjetas.
– El transporte estará conectado a un sistema central. Así, habrá actualizaciones en tiempo real y sistemas de reserva digital.
Pero… siendo más concretos, ¿qué tipo de transporte nos espera en el futuro? Aquí tenemos algunos ejemplos:
Coches autónomos
Con la puesta en marcha de los coches eléctricos 2.0 el objetivo es reducir las emisiones de CO2. Pueden recorrer hasta 400 kilómetros sin tener que cargarlos. Se cree que para 2030 en varios países europeos solo circularán estos automóviles. Para consolidar este sistema de transporte, se instalarán postes de energía en las autopistas con los que se cargará la batería en menos de diez minutos.
Asimismo, los vehículos autónomos permitirán una circulación más fluida y segura. La Inteligencia Artificial y la conectividad permitirán que el automóvil cuente con información sobre el entorno, algo que incrementará la seguridad. Por ejemplo, en casos de emergencias y accidentes, los vehículos frenarán a la vez y realizarán llamadas automáticas a los servicios de emergencia. Asimismo, cuando se encuentren en un atasco, se repartirán de manera inteligente por caminos alternativos.
La tecnología ya está desarrollada. Solo falta regularlos y construir infraestructuras. Estos vehículos también pueden adelantar de forma automática y detectar semáforos y señales. Está previsto que en siete años las carreteras estén plagadas de ellos.
Además, serán capaces de conocer tus gustos y preferencias. A través del reconocimiento facial o de voz, por ejemplo, los vehículos sabrán con qué temperatura te sientes más cómodo en el interior, tu música preferida…
En cuanto al servicio de transportes, los taxis tampoco necesitarán conductor y se podrán pedir a través del móvil. Estos vehículos serán más seguros gracias a la tecnología que tienen implementada: cámaras, sensores, radares, GPS, conectividad y software propio. Pensado en un inicio por el diseñador Kubik Petr, cuenta con dos asientos y está propulsado por dos motores eléctricos conectados en las ruedas traseras. Todo ello con una autonomía de hasta 20 horas. Los pasajeros escribirían el destino a través de una pantalla táctil.
Para 2025, la idea es que haya menos coches particulares y más compartidos.
Modelos propuestos
Los fabricantes de coches, las compañías tecnológicas y los legisladores estiman que los coches autónomos circulen por varias carreteras de Estados Unidos, Reino Unido, Finlandia y Alemania.
La mayoría de ellos pertenecerán a empresas que los alquilarán. El objetivo es disminuir los siniestros y mejorar el tráfico. Estos vehículos están dando resultados muy buenos en las pruebas a las que se han sometido. Volvo en Goteborg; Peugeot y Citroën en Francia y España; y Mercedes-Benz en circuitos de Europa, Estados Unidos, China, Australia y Sudáfrica. De hecho, ya hay vehículos semiautónomos en el mercado, como Tesla.
Cabe destacar a Waymo (coche de Google), una de las empresas pioneras en el sector de la conducción autónoma. Sus automóviles han recorrido ya más de 16 millones de kilómetros. La idea es que, en dos décadas, el 95% de los kilómetros recorridos sean con vehículos eléctricos autónomos.
El caso de España y Europa
En nuestro país se han llevado a cabo test de un autobús urbano autónomoen San Sebastián, Talavera de la Reina y Málaga. Cataluña también se ha sumado.
Es eléctrico, cuenta con 12 plazas (seis para sentarse y otras seis para estar de pie) y ya tiene nombre: Èrica. Responde a las siglas de: Eléctrico, Revolucionario, Inteligente, Compartido y Amable.
En Europa, ya existen servicios implantados, como lanzaderas en Lyon y un autobús que opera en el aeropuerto de Schipol, en Ámsterdam. Este abarca una distancia de 20 kilómetros y circula a una velocidad de 70.
Trenes que levitan mediante electroimanes
El pionero ha sido el llamado tren maglev (magnetic levitation), un ferrocarril que utiliza propiedades magnéticas y cuánticas para levitar. Así, se acaba con la fricción, que impide que el vehículo vaya más rápido. Por lo tanto, este tren alcanza los 600 km/hora. Por ejemplo, el AVE español no pasa de los 300 km/hora.
El maglev es más estable y, así, uno de los transportes más seguros. El objetivo es que sustituyan a los trenes normales e incluso que puedan competir con los aviones. Aunque la activación de un maglev es más barata que el combustible de un avión, también es cierto que el mantenimiento de las infraestructuras que necesita este tren es muy caro.
El tren se somete a un fuerte campo magnético gracias a imanes de superconducción. Flotan unos 10 centímetros. Cualquier vehículo que no esté diseñado para alcanzar esa velocidad descarrilaría. Por ello, estos trenes están creados para que aprovechen el aerodinamismo y la manera en la que se comportan los fluidos, que a una velocidad determinada cambian su forma de funcionar, para ser más estables a medida que van más rápido.
Hyperloop, el denominado quinto medio de transporte
Es un maglev que circula por un tubo de vacío, algo que le hacer ser el doble de rápido que uno que se mueve al aire libre, concretamente a más de 1.200 kilómetros por hora.
En octubre de 2018 este tren supersónico, más propio de la serie Futurama, dio el paso definitivo para convertirse en realidad. La empresa gaditana Carbures presentó la primera cápsula para pasajeros del Hyperloop: la ‘Quintero One’. Su diseño ganó el Premio de Oro de los London Design Awards . Está hecha de un 85% de fibra de carbono, tiene capacidad para hasta 40 pasajeros, mide 32 metros de largo y pesa cinco toneladas. Además, la fibra de carbono hace que se consuma menos energía y CO2.
En principio, está previsto que en 2019 esté lista para ser utilizada., aunque el Hyperloop no funcionará hasta 2020. Será en Abu Dhabi y cubrirá el trayecto entre su aeropuerto y la ciudad (14 km). Más tarde se extenderá a Dubai y recorrerá en 12 minutos los 140 km que separan las ciudades. La idea es que las siete ciudades de Emiratos Árabes Unidos estén conectadas por este medio de transporte.
Clip-Air, un avión que transporta otros aviones
El Clip-Air lo compone un ala volante con motores y una cabina de mando; y las cápsulas o contenedores desmontables donde irían los pasajeros. Para entenderlo mejor, imagina tres aviones normales. Quitale las alas, los motores, la cola y la aleta. Quédate solo con la parte en la que viajan las personas. Esos tres contenedores resultantes se incorporan a un avión más estéticamente más aerodinámico y tres veces más grande. Eso es el Clip-Air.
Vahana, el taxi de ciencia ficción
Se trata de un vehículo volador con despegue y aterrizaje verticales, totalmente eléctrico, y guiado por Airbus para zonas urbanas.
El objetivo de este proyecto es democratizar los vuelos personales con soluciones que funcionen como las aplicaciones móviles que utilizamos para reservar taxis.
Se calcula que este vehículo revolucionario cuenta con una autonomía de 80 kilómetros. En enero de 2018 Airbus realizó con éxito la prueba del prototipo. Se elevó cinco metros y descendió sin problemas después de permanecer casi un minuto en el aire.
Aviones supersónicos, Quiet Supersonic Transport
Son muchas las empresas que añoran las míticas hazañas del famoso avión supersónico Concorde, que durante casi 30 años estuvo surcando los cielos. Quince años después de su retirada debido a un grave accidente y a la escasa rentabilidad que proporcionaba, Boeing ha presentado sus planes para crear un avión hipersónico que vuele de Londres a Nueva York en solo dos horas. La aeronave volaría cinco veces más rápido que la velocidad del sonido, a unos 6.500 kilómetros por hora. La compañía calcula que podría entrar en funcionamiento dentro de unos 20 años.
Airlander, avión y dirigible
Una especie de avión-zepelin. Se trata de un dirigible de 92 metros de longitud y con una capacidad de carga de 10 toneladas. Puede volar a 5.000 metros de altura y a 150 kilómetros por hora. Aspira a convertirse en la primera de una nueva generación de aviones silenciosos, eficientes y poco contaminantes.
Sin embargo, en seis vuelos de prueba realizados durante dos años, la aeronave se ha estrellado dos veces y ha presentado varios problemas mecánicos y, por tanto, de financiación. Ambas por motivos similares. El dirigible se desprendió de su mástil de amarre.