Un joven investigador chino ha creado un dispositivo que potabiliza el agua con una alta eficiencia.
Casi 700 millones de personas en el mundo no tienen acceso a agua potable según la Organización Mundial de la Salud (OMS). La cifra ha mejorado en las últimas décadas: si en 1990 el 76% de la población podía beber sin miedo, en 2015 el porcentaje asciende hasta el 91%. Pero queda mucho trabajo por delante: ahora, una investigación publicada en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences(PNAS) propone un nuevo sistema que permitirá desalinizar líquido con energía solar, todo gracias a un dispositivo portátil fabricado con óxido de grafeno.
El investigador de la Universidad de Nanjing (China) Jia Zhu es la mente tras el invento. Este joven de 34 años fue seleccionado este año por la revista MIT Technology Review como uno de los innovadores menores de 35 cuyo trabajo ’empuja’ los límites de la ciencia, pues ha dedicado su carrera a desarrollar nuevas tecnologías que sacien la sed de los cientos de millones de personas que carecen de agua potable.
“Se ha logrado un progreso impresionante en este campo durante la última década, pero es un hecho abrumador que la escasez de agua es todavía un reto global”, explica Zhu a Teknautas. El investigador aboga por explorar cada posible ruta para desarrollar tecnologías “que superen los límites conocidos”. Según el estudio publicado en PNAS, Zhu y su equipo han desarrollado un dispositivo a partir de óxido de grafeno que desaliniza agua con una eficiencia del 80% utilizando sólo energía solar, sin ayuda externa. El aparato evita la pérdida de calor confinando el agua en un espacio en ‘dos dimensiones’: una especie de sándwich entre un absorbedor solar de óxido de grafeno y un aislante térmico. El líquido se evapora, dejando atrás la sal y los contaminantes solidificados.
El dispositivo ha sido probado de momento en laboratorio, pero Zhu asegura que “la tecnología es muy escalable y además se puede plegar, por lo que es apto para su utilización a gran escala”. Según el investigador, en estos momentos están ensayando la tecnología con unas dimensiones mayores, de “decenas de metros cuadrados”.
AGUA PARA TODOS
Zhu considera su tecnología un complemento de otras actuales como la ósmosis inversa. El propio investigador ha creado otras tecnologías similares en el pasado. A comienzos de 2016 anunció una tecnología similar fabricada a partir de aluminio: “Conforme los conocimientos en ciencia de materiales, óptica y termal aumenten, lograremos que estos desarrollos alcancen su potencial máximo. El investigador explica que sus diseños son, en realidad, “tecnología ‘antigua'” que hasta ahora estaba limitada por la eficiencia, ya que la producción del agua era incompatible con su uso práctico. Gracias al desarrollo de nuevos materiales como el grafeno será posible sacar el invento de este laboratorio chino y llevarlo a los países que más lo necesitan.
Noviembre 2016
Autor: S. Ferrer
Fuente: madri+d