La goma y los plásticos sintéticos, utilizados para fabricar neumáticos, juguetes y muchos otros productos, se producen a partir de butadieno, una sustancia tradicionalmente hecha con petróleo o gas natural. Pero estos materiales artificiales podrían llegar a ser pronto mucho más ecológicos (y renovables), gracias al ingenio de un equipo de científicos de la Universidad de Delaware, la de Minnesota y la de Massachusetts, las tres en Estados Unidos, el cual ha inventado un proceso para fabricar butadieno a partir de fuentes renovables como árboles, hierbas y grano.
El equipo de Dionisios Vlachos (Universidad de Delaware) combinó un catalizador, que él y sus colegas descubrieron recientemente, con algunas innovaciones químicas muy prometedoras, para hallar el método de fabricación de butadieno capaz de ofrecer la mayor producción y el menor coste.
El butadieno es un componente químico esencial en una amplia gama de materiales de uso común. Cuando esta molécula con cuatro átomos de carbono sufre una reacción química que provoca la formación de unas cadenas largas llamadas polímeros, se produce caucho de estireno butadieno , que se utiliza en neumáticos de automóviles resistentes a la abrasión. Cuando este material se mezcla con caucho de nitrilo butadieno, se convierte en el componente principal de mangueras, juntas de estanqueidad y guantes de goma.
En el mundo de los plásticos, el butadieno es un componente químico esencial en el acrilonitrilo-butadieno-estireno (ABS por sus siglas en inglés), un plástico duro que puede ser moldeado para conseguir las formas rígidas deseadas. El plástico duro ABS se usa para fabricar consolas de videojuegos, piezas de automoción, productos deportivos, dispositivos médicos y piezas para juegos de construcción, entre otros.
Fuente: Noticias de la Ciencia